"Se pueden arreglar campeonatos enteros, como el de Boca de Ischia." Javier Ruiz árbitro "Ehhehh, eh yo pienso de que ehhehh eeeehh (?)." DAP "No estén cagados." Daniel Passarella

lunes, 26 de septiembre de 2016

Un partido vertiginoso y desequilibrado lleno de goles y errores

El festejo de los delanteros

A veces me pregunto si la ley del ex funciona para todos o solo está hecha para River Plate. Tal vez es un aviso para que seamos más cuidadosos (?) a la hora de las compras y ventas (o los jugadores que dejamos libres y los que traemos al pedo). 

Ayer se volvió a jugar contra un equipo inteligente (muy diferente al esquema que presentó Lavallén la semana pasada en el Monumental), con menos recursos pero optimizados al máximo. Un equipo que se animó a jugar de igual a igual, que presentó un juego atrevido y caótico pero que nunca bajó los brazos y River Plate aceptó ese caos (aún cuando pasó a ganar 3 a 2 y dejó de convenirle). Empezaron jugando mucho mejor, los golpeó un gol en contra (cuando River Plate empezaba a tener el manejo del balón pero no llevaba peligro) y a los 5 minutos se encontraron en desventaja. A pesar de ello mantuvieron un equema de presión y convicción, y se jugaron varias fichas a llevar peligro con los centros al área donde Barboza ganó como quiso (vaya uno a saber porque Gallardo no le quiso dar una oportunidad). Un partido con mucho vaivenes y situaciones extrñas.
Batalla no pudo con el penal

El partido empezó complicado. Batalla cometió un error (que podría no haber sido muy grave pero Maidana cometió un penal y nos puso en desventaja) y eso podría haberlo afectado pero eso no sucedió y tuvo algunas atajadas importantes (lamentablemente sigue sin salir del arco, aquella falla en una salida en la pretemporada pareciera que sí lo afectó); ayer lo peor pasó por la derecha, Moreira bajó mucho su nivel, dejó de ser el jugador increíble para ser un jugador con fallas y sin tanta decisión (como si le hubiera caído una ficha y perdiera la confianza); ya no sube tanto y sufre en defensa. Gallardo va a tener que trabajar mucho el tema de las espaldas de los laterales y darles confianza para que suban. Maidana tuvo uno de sus peores partidos, cometió un penal por ir a destiempo, le cabecearon con mucha facilidad en el segundo gol, durante todo el partido sufrió en los centros (no se porqué defendió a Barboza, tal vez hubiera convenido que su lugar fuera ocupado por Mina que es más alto) y le costó mucho cubrir las espaldas de Moreira. Por izquierda se sufrió menos (aunque no fue el ideal), Mina siempre estuvo al borde y si bien perdió en velocidad, varias veces salva la situación imponiendo su físico. El que jugó muy bien fue Casco (ante la falta de presencia de Moreira, Casco fue el que subió), jugó mucho en ataque, subió con confianza y llevó mucho peligro, se entiende cada vez mejor con Pity (probablemente ese sea el problema del paraguayo, tal vez D´Alessandro le da más confianza y no se entiende tan bien con Andrade). Además de los altos y bajos, el gran problema es que se jugó con mucho desorden (ante lo que proponía Defensa y Justicia era lógico) y por eso se cometieron muchos errores (en ambos equipos). Cerca del mediocampo había muchos jugadores listos para presionar y salir en velocidad, mucha gente, muchas piernas y la ¨guerra¨ entre Jonás Gutierrez (muy buen primer tiempo pero no aguantó el ritmo) y Ponzio (perdió mucho pero mantuvo al equipo enfocado). Fernandez pasó a ser un termómetro del equipo y ayer se mezcló en ese caos.
Todo bien, Alario eludió al arquero pero... no fue gol

Para mi gusto, Martinez sigue levantando mucho su nivel y pasó a ser el jugador más importante en el esquema de Gallardo (especialmente porque D´Alessandro no logra desequilibrar ni tener un rendimiento regular). Martinez es quien rompe la defensa rival, agrupa defensores por su sector y permite que las defensa se abra para que entren otro jugadores por el medio o cambiar el juego hacia la derecha donde pueden entrar jugadores más abiertos. Es cierto que pierde mucho pero la balanza empieza a ser positiva y provechosa (aunque muchos se detienen solo en sus pérdidas). Se entiende bien con Driussi (tuvo mucha participación y convirtió 2 goles) y Casco y solo faltaría que tuviera mejor contacto con Alario (fundamental para el ataque actual). Su expulsión tonta va a provocar que probablemente ante Velez Gallardo cambie el esquema. Andrade tuvo un partido flojo (aunque fue muy importante en los últimos goles) pero intentó ser participativo. Lo más importante de Martinez es que nunca le huye a la responsabilidad de pedir la pelota (lo mismo pasa con D´Alessandro) y Andrade aún es muy joven y supongo que en algún tiempo tendrá la capacidad y experiencia para tomar esa responsabilidad de llevar el peso del juego, por ahora acompaña (muy bien). En medio de todo esto, Alario es un jugador que busca sus espacios (ayer quedó varias veces en posición adelantada) y que debe aprovechar las pocas chances que le llegan (ayer no la aprovechó, se nubló en la últlima puntada, lo que normalmente es su mayor virtud).
Un codazo y veremos cuantas fechas le dan

Se perdieron otros 2 puntos empatando esta vez 3 a 3, en un torneo tan largo es imposible saber cuanto dolerán estos últlimos 4 puntos y habrá que ver como influye en el juego futuro pero, como suelo decir, estas son las consecuencias lógicas de tener un equipo en formación... 

Por Charro.

viernes, 23 de septiembre de 2016

Otro paso importante con vértigo

Un error del arquero que salvó varios goles. Ahí estaba el goleador para aprovechar...

Las anteriores copas argentinas nos tuvieron envueltos en peleas por títulos internacionales (las últimas sudamericanas) o peleando un título nacioal semestral (el apertura ganado por Ramón) y eso colocó a esta copa como la tercera opción o la menos interesante. Hoy, las ironías del destino la convierten en la más deseada para todos los clubes (solo 3 equipos juegan la Sudamericana, el torneo local es anual y la copa Argentina da cupo para la Libertadores 2017) y River Plate deberá aprovechar que tiene un fixture relativamente menos complicado.
Fernandez; clave en el esquema del Muñeco

River Plate sigue siendo un equipo en formación (con todo lo que ello implica) y en medio de la construcción va viendo que debe cambiar, que no debe hacer, que debe mejorar y cuando debe hacer cada cosa. También es lógica la irregularidad y por eso habrá que esperar que el costo no sea muy alto cuando nos toque un mal partido o algún momento (ayer al inicio del segundo tiempo hubo 3 pelotas que milagrosamente no terminaron en gol de Arsenal, esto podría habernos complicado muchísimo).

El partido de ayer fue ante un Arsenal que quiso parecerse a San Martin de San Juan pero terminó siendo más timorato y menos compacto (o tal vez se enfrentó a una mejor versión millonaria). River Plate dominó gran parte del partido y no cometió tantos errores pero como suele ser habitual, cuando se arriesga se sufre. Sacando la dormilona de los primeros minutos del segundo tiempo, el equipo demostró que vuelve a tener la identidad ganadora que Gallardo supo aprovechar del grupo anterior; tiene esa distinción con la que dotó al plantel anterior y ya se empiezan a ver algunas semejanzas.
Casco estaba en duda pero le respondió al técnico

La defensa vuelve a tener 2 centrales muy duros, de buen juego aéreo y de mucha personalidad (aunque ahora nos falta el jugador con el perfil zurdo). Mina tendrá que trabajar mucho para darnos lo mismo que nos dio FM6 pero Gallardo apuntó bien. Los laterales vuelven a ser correctos en la marca y acompañan muy bien a la hora de atacar, vuelven a ser una alternativa ofensiva (Moreira tira excelentes centros, tiene más recursos ofensivos, le gusta patear al arco y tiene mejor ida y vuelta pero aún le falta imponer personalidad ante los delanteros rivales y marcar goles importantes; Casco empieza a mostrarse más seguro en defensa y sube con mejor criterio pero aún le falta conseguir regularidad). La gran incógnita defensiva está en el arco; Batalla no muestra seguridad pero por ahora responde (aunque pareciera que siempre está bajo la lupa de todos).
Ponzio, el alma del equipo (al margen... como pegó el 5 rival)

Otra gran ventaja defensiva se consiguió en el medio. Gallardo consiguió reemplazar a Rojas. Encontró en Nacho Fernandez al jugador que le da despliegue, que puede iniciar el ataque y puede ser la constante rueda de auxilio para Ponzio, encontró una dupla en el medio que le permite ser ofensivo pero que al mismo tiempo no deja partido al equipo, jugadores que marcan en retroceso y ayudan a los defensores para que no sean tomados por sorpresa por los rivales que vienen desde su propio campo. Ayer todos esos jugadores jugaron correctamente y desde allí se empieza a edificar un equipo solvente. Ponzio sigue siendo desprolijo pero al mismo tiempo es el alma del equipo, le da personalidad y planta el equipo de frente a cualquier rival, no quiere que el rival se sienta cómodo ni que nosotros nos relajemos, mientras que Fernandez pasó a ser el termómetro del equipo.
 Alario junto a Dale y Pity...

Las dificultades siguen estando en la ofensiva. D´Alessandro es un jugador interesante y práctico para parar el juego, para poner la pelota sorpresiva que puede definir el partido y fundamental para armar paredes cortas que permitan pasar las defensas cerradas pero el físico no le responde para un juego agresivo como pretende Gallardo y me preocupa su falta de fuerza para los tiros de larga distancia (incluyendo tiros libres y córner). Pity Martinez es otro jugador fundamental pero demasiado volátil, mientras D´Alessandro hace el amague a los costados, Pity lo hace hacia delante, la mayoría de las veces hasta el fondo pero no muchas logra pasar. Un caso de habilidad con mala decisión que es muy importante para romper las defensas rivales. Por último quedan Driussi (sin tanta participación esta vez) y Alario (el hombre del equipo). Está en un gran momento, define los partidos, hace los goles importantes.
Uno de los cabezazos que se fue junto al palo. Alario se fabricó varias situaciones...

Empieza a delinearse el equipo, la formación sale de memoria y se ven algunos buenos partidos. Falta regularidad y capacida para romper estos esquemas cerrados. Ayer se jugó bien y se llegó varias veces a situación de gol. Habrá que seguir trabajando para darle fluidez, velocidad y determinación al equipo. Lo importante es que ayer el equipo volvió a ser agresivo para recuperar la pelota y veloz para llegar al arco rival. Un buen paso aunque el 1 a 0 final llevó a la incertidumbre del partido. El arquero rival fue la figura pero ahí estuvo el goleador cuando el arquero se equivocó. Un paso más para encontrarse con la copa y la clasificación a la copa Libertadores del próximo año.

Por Charro.

lunes, 19 de septiembre de 2016

Alerta y decepción en el largo camino

A un año de las elecciones, ¿todos quieren estar en la foto?

Cuando se habla de un equipo en formación es lógico esperar algunos contratiempos que impliquen aprendizaje; lo importante es que esas lecciones no resulten caras. Ayer River Plate no estuvo a la altura del partido y le costó 2 puntos importantes de local. Este es un campeonato largo (con un receso incluido) en el cual es difícil evaluar el valor de los puntos que se van perdiendo en el camino.

Lo más importante de la tarde fue el reconocimiento a Maidana (por sus 200 partidos en la institución recibió una camiseta conmemorativa y además durante el partido recibió otra ovación de todo el estadio) y el saber que hay mucho por mejorar (Gallardo lo dejó claro). Ayer River Plate no venia haciendo un buen partido pero le alcanzaba para ser algo mejor que el rival hasta que llegó el gol de Alario promediando el primer tiempo. En estos partidos, lo difícil suele ser conseguir el gol que abre el partido pero en el caso de ayer, solo sirvió para relajar al equipo y el gol rival (al principio del segundo tiempo) fue una consecuencia lógica de un planteo en el cual el rival presionó mejor.
No le tocó el mejor partido pero respondió a la obligación

Batalla sigue dando rebotes pero salvó varias situaciones complicadas (especialmente un tiro a quemarropa) y no tuvo nada que hacer en el gol. La defensa quedó muy jugada por las constantes subidas de Olivera y Moreira, lo cual no sería tan problemático si hubieran sido bien aprovechados. Uno de los grandes problemas que tuvieron es que fueron muy bien cubiertos y además los rivales aprovecharon sus espaldas cuando robaban la pelota. En el primer tiempo muchas veces Olivera subía libre pero no recibía la pelota (algunas veces también le pasaba a Moreira) y así solían ganarle la espalda en velocidad con centros cruzados. Olivera respondió muy bien en cuanto a que no le pese el partido, hizo lo que debía (ida y vuelta incanzable), se bancó la presión del resultado y los nervios de los hinchas pero tendrá que trabajar y acostumbrarse mucho con el tema de los relevos y coordinar esas subidas con Moreira. El paraguayo tuvo su partido más flojo si bien mostró sus habituales cualidades, no logró herir con sus centros (bien cubierto por el rival, siempre había 3 defensores para cubrirlo a él y al Cabezón), no se conectó demasiado con D´Alessandro ni con Fernandez y varias veces le ganaron la espalda (en algunas Nacho lo ayudó pero en el gol no llegaron a tiempo). Maidana y Mina volvieron a darle personalidad a la defensa, el ecuatoriano tiene a veces problemas con la velocidad pero suele suplirlo con determinación y seguridad (aunque el tiro a quemarropa fue porque no llegó a cerrar el centro atrás del rival). Las jugadas de más riesgo las tuvo San Martin de San Juan (salvo el tiro de Alonso en el travesaño sobre el final del partido y la pifia de Pity frente al arquero en el primer tiempo) gracias al buen aprovechamiento de las espaldas de los laterales y a que subieron con buena cantidad de jugadores (impidiendo la cobertura de los centrales). Ponzio volvió a mostrar mucha personalidad (vuelve a estar en un gran nivel, se nota que se siente caudillo y titular indiscutido) pero no logró ser un conductor claro para iniciar los ataques (mismo problema que tuvo Nacho Fernandez). Nacho Fernandez tuvo despliegue, voluntad, participación pero no estuvo fino con la pelota, algo muy similar a lo que le pasó a D´Alessandro (cuando no logra conectarse con el juego y manejar los tiempos del partido, se convierte en un peso para el equipo, su físico ya no le da para el ritmo que quiere imponer el equipo de Gallardo, a pesar que varias veces se lo ve correr para cubrir la salida rival, y lo que más preocupa es su falta de fuerza o miedo para tirar los centros o patear los tiros libres).


Ante la falta de claridad y determinación de los conductores (lo que más me extrañó fue la falta de confianza para hacer los cambios de frentes para Olivera o Moreira en el primer tiempo, cuando lo hicieron en el segundo tiempo, los sanjuaninos se cerraron muy bien y ya no supieron romper ese bloque), era fundamental el trabajo del Pity. El Pity es irregular y suele complicarse, tiene destellos y es clave para romper las defensas cerradas, su gambeta vertical es muy importante pero sirve cuando puede descargar con un compañero o tirar un centro hacia atrás. Ayer lo consiguió algunas veces pero no alcanza cuando el resto del equipo no está en la misma sintonía. Arriba, Driussi fue movedizo y molesto pero no gravitó, mientras que Alario no estuvo fino con la pelota pero peleó constantemente y recuperó varias pelotas, sin encontrarse con la pelota aprovechó para convertir en gol su única oportunidad. Los delanteros corrieron mucho para tapar la salida del rival (que varias veces lo resolvió bien) pero no tuvieron muchas chances de gol. 

Es una pena que los cambios tampoco resolvieran el dilema (Andrade entró muy tarde y Alonso no pudo convertir su chance). Una pena haber perdido estos puntos aunque hay que reconocer el buen partido del rival (un equipo sin jugadores conocidos ni gravitantes) y aprender de los problemas cuando no se presiona bien, cuando se relaja el equipo y no busca ampliar la diferencia y ser conciente de los riesgos que tiene ser un equipo ofensivo (especialmente cuando no se busca con convicción la diferencia en el arco contrario).

Por Charro.

lunes, 12 de septiembre de 2016

Tres puntos peleados y una muestra de carácter

El abrazo de Lollo con el ecuatoriano apenas convierte el gol. Un mensaje importante del grupo

River Plate vuelve a proponer un fútbol asfixiante, de mucha presión en toda la cancha con la intención de tomar desordenada a la defensa rival y con el deseo de necesitar un recorrido corto para llegar al arco rival. El problema surge cuando el otro equipo acepta el reto y propone una defensa cerrada y la misma presión asfixiante. El partido pasa a ser duro, trabado y con poco fútbol, donde gana el que tiene más oficio, suerte y la inteligencia para aprovechar el error rival o para mantener la ventaja conseguida. Este nuevo plantel vuelve a mostrar sus garras y determinación, vuelve a mostrarse seguro, con hambre y con capacidad de lucha, vuelve a tener juego (o capacidad de mover rápido la pelota si el juego lo exige) y rapidez para desprenderse de la pelota.
Maidana recibió los tapones de frente en su cara (y le cobraron la falta a él). Un gladiador.

Ayer River Plate se encontró con un partido muy difícil, con un rival motivadísimo (un grande del interior que volvía a primera en su ciudad después de 12 años y con un invicto de 40 partidos) y la capacidad para pelear en cada sector de la cancha durante casi todo el partido. Talleres fue muy duro pero sintió el gol sorpresivo de River Plate y a partir de ese momento no supo o no pudo acercarse al arco de Batalla.
La entrega de Moreira es fundamental. Ojalá mantenga este gran nivel.

River Plate vuelve a estar ordenado y sigue presentando un alto nivel en varios jugadores, vuelve a ser paciente e intenta manejar la pelota a su ritmo y según lo que pida el partido. Esta vez no se lució como en la fecha anterior pero mostró otros atributos también necesarios para ser candidato. Una de las mayores virtudes que tiene este nuevo plantel es la rápida adaptación de los nuevos jugadores (y de los que habían llegado en el semestre pasado pero todavía no habían conseguido adaptarse) y la capacidad para aceptar la propuesta de Gallardo.
Un rebote pero con una rápida reacción...

Gallardo consiguió repetir la formación pero a los pocos minutos de juego debió salir Casco por una molestia muscular y se produjo un cambio ¨extraño¨ pero que debe estar trabajando el entrenador para cuando sucede una contingencia así. Moreira pasó a la izquierda y entró Mayada. Lo bueno es que ambos jugadores respondieron muy bien. El paraguayo no fue tan peligroso pero volvió a mostrar su predisposición para participar en el ataque, esta vez no llevó peligro constante al área rival pero fue un enlace en ataque y fundamentalmente ayudó mucho para que la presión y la salida empiece en el mediocampo. Batalla vuelve a mostrar mucha inseguridad pero salvó una jugada fundamental del partido (esa pelota complicada que te puede quitar puntos fundamentales a lo largo del torneo), volvió a dar muchos rebotes inentendibles pero que carecen de riesgo. Intenta no complicarse (aunque esos rebotes podrían complicarlo muchísimo) y hasta ahora no tuvo que lamentar un error grave. Por las bandas se siguió marcando bien y tanto Mayada como Moreira atacaron con inteligencia (el paraguayo inclusive tuvo 2 tiro muy peligrosos al arco rival, uno pegó en el palo y el otro logró sacarlo el arquero en una gran estirada), mientras que Maidana y Mina volvieron a jugar sin errores. Mucha personalidad y determinación, algunos errores fueron subsanados y el ecuatoriano hasta se dio el lujo de hacer una jugada riesgosa pero fundamental casi al terminar el primer tiempo (eludió 4 jugadores para llegar a campo rival y despejó el ataque para tener la situación más clara del primer tiempo). Maidana sigue siendo el dueño de la defensa y mantiene un trabajo silencioso pero de mucha efectividad.
Mina y una extraordinaria capacidad de salto, ojalá de muchos goles

Ponzio volvió a adueñarse del medio. Se presentó un partido como a él le gusta, mucha presión, desorden pero la exigencia de poner personalidad y el permiso de raspar mucho (aunque siempre con un límite claro). Obviamente terminó con una amarilla pero conoce muy bien el límite a pesar de haber tenido que lidiar principalmente con Gil (una de las figuras de Talleres). Nacho Fernandez fue víctima del desorden general del mediocampo, tuvo la complicada tarea de tener la pelota en la presión constante pero nunca eludió la responsabilidad de pedir la pelota, se bancó las patadas permanentes y ayudó en la conexión ofensiva (especialmente después del gol, cuando Gallardo pidió que se moviera mucho la pelota). El Pity y D´Alessandro no lograron gravitar como hubieran querido pero Martinez logró romper la defensa rival en el primer tiempo y en el segundo le costó más, en cambio D´Alessandro tuvo un par de asistencias muy buenas pero no mucho más. Al igual que Fernandez, tanto el Cabezón como el Pity tuvieron la gran virtud de no escparle nunca a la tarea de buscar el pase, de pedir la pelota y de moverse mucho para poder recibir el balón (también corrieron mucho para molestar la salida rival en el mediocampo).
Otro gran salto y otra gran foto de Haliasz

Adelante Driussi volvió a mostrarse como un delantero capaz de bajar varios metros para conectarse con los generadores de juego pero no estuvo tan efectivo a la hora de definir (¿le falta determinación?) aunque de su disparo salió el rebote que le permitió convertir a Mina. Alario volvió a tener un partido para pivotear, mucha lucha y fricción pero sin oportunidades de gol. Le llegaron algunos pelotazos pero casi no tuvo chances. No le gustó ser reemplazado sobre el final del partido (una imagen similar a la que dio D´Alessandro en la fecha anterior) pero Gallardo parece que quiere darle algunos minutos a Larrondo (baja mucho, ayuda a mover la pelota pero por ahora tampoco tuvo espacios para generar su jugada). Alonso también entró por Driussi y volvió a mostrar su intensidad y su lucha para molestar la salida rival.
Caudillos, 2 de los dueños del alma de este equipo (junto a Maidana)

En resumen, un partido deslucido pero en el que se mostraron actitudes muy importantes para un equipo con pretensiones. Un equipo que deberá seguir creciendo pero mientras tanto sigue sumando y acepta la chapa de candidato. 

Por Charro.