"Se pueden arreglar campeonatos enteros, como el de Boca de Ischia." Javier Ruiz árbitro "Ehhehh, eh yo pienso de que ehhehh eeeehh (?)." DAP "No estén cagados." Daniel Passarella

lunes, 2 de octubre de 2017

Un punto sin brillo

Con un penal Scocco mantiene su racha goleadora

Es arduo y agotador el trabajo de armar un nuevo equipo, tanto para el cuerpo técnico como para los hinchas. Lleva mucho tiempo evaluar, encontrar y lograr que lleguen jugadores capaces de vestir el manto sagrado, cuesta otro tanto que entiendan y lleven adelante eficientemente el trabajo que pretende el cuerpo técnico, luego hay que decidir cuales sirven y cuales no de esas compras que se realizaron y finalmente, cuando nos quedamos con los que realmente valen la pena, hay que nutrirlos de experiencia para que no fallen en los momentos cruciales. Todo ese trabajo se empezó a hacer con Almeyda (con la vuelta a primera), continuó Ramón (con el título nacional) y terminó con Gallardo (y sus copas internacionales). Rápidamente se liquidó a ese plantel y Gallardo tuvo el complicado trabajo de rearmado que mezcló con algunos títulos que le dieron aire para continuar con este trabajo pero que se complica cuando aparecen ventas sorpresivas que destruyen la planificación.

Después de un largo trabajo se había conseguido encontrar jugadores acordes al momento que está viviendo River Plate (competir en instantcias finales de Copa Libertadores, Copa Argentina y campeonato nacional), excepto el puesto de arquero (que no se reforzó a principio de año y ahora era complicado encontrar un arquero importante), los demás puestos estaban bastante cubiertos (especialmente luego de la compra de Saracchi) y hasta se había dado un importante salto de calidad con el ingreso de Scocco y Perez, pero todo eso se derrumbó con la salida de Alario y la lesión de Larrondo (más allá de las salidas acordadas de Driussi y Alonso y la lesión de Mora). No es solo la salida del jugador más determinante que teníamos, sino la necesidad de encontrar un nuevo esquema y diferentes soluciones para un problema gravísimo. Con Alario y Driussi se fueron los goles y ahora hay que encontrar nuevos caminos para llegar al gol (y si se hacen menos goles en el arco contrario hay que conseguir que no nos hagan goles con facilidad).
Ponzio y su constante trajín

Gallardo busca variantes ofensivas y defensivas al nuevo problema pero mientras busca la forma de llegar al gol se va dando cuenta que no es fácil mantener el propio arco en 0. Llegar al gol no implica tranquilidad ni la posibilidad de manejar el trámite del partido gracias a la solidez defensiva porque cualquier pelota parada es un riesgo y porque el manejo del balón no lleva peligro al área rival. Los partidos ante AAAJ y Tigre nos muestran esta nueva realidad, Gallardo está trabajando y es cierto que tiene muchísimo por mejorar pero la pregunta es si lograremos ganar alguno de los títulos teniendo en cuenta todo lo que le falta al equipo para ser ¨temible¨. Habrá que confiar en Gallardo cuando dice que él vio a un equipo con tenencia y sin profundidad, con lo cual piensa que no está tan lejos de lo que pretende...
La lluvia hizo complicado el trámite del partido

Ayer, ante Tigre, se volvieron a ver muchos errores defensivos y poca creatividad y peligrosidad ofensiva (supongo que Gallardo se habrá ido muy preocupado). Lux atajó un penal y no tuvo nada que hacer en el gol pero tampoco tuvo más trabajo; en defensa, los laterales tuvieron un trabajo de mucho ida y vuelta, Moreira estuvo muy participativo en ofensiva (extrañamente hizo mucho la diagonal, algo que suele hacer Casco y que tanto le gusta a Gallardo) pero fue Casco el que más falló (increíblmente fue llamado para la selección). A Casco no le sentó bien (?) saber que tiene un reemplazo de calidad. El gran problema es que Maidana y Pinola no forman la dupla que deberían formar según sus antecedentes; no están seguros, no se acoplan, están lentos, inseguros y cometen muchos más errores de los esperables, son 2 jugadores de calidad superior que en lugar de formar una dupla memorable, apenas la están peleando, en lugar de potenciarse se esán disminuyendo. A todas estas dificultades se suma un Ponzio que vuelve a mostrar despliegue pero poca participación efectiva en ofensiva y poco orden en defensa. Tener a Enzo Perez al lado hace que casi se desentienda de la ofensiva y carecer de Rojas lo desordena. 
Pocos momentos de juego y muchos de pelea

En ataque River Plate tuvo algunos buenos momentos, cuando Nacho Fernandez se mueve, avanza con sorpresa y se junta con Enzo Perez (va tomando las riendas del equipo y empieza a ser un capitán más dentro del campo de juego, un punto importante teniendo en cuenta que Ponzio ya piensa en retirarse), la ofensiva encuentra caminos, el problema llega cuando se ponen imprecisos o pierden movilidad (en una cancha chica como la de Tigre es fundamental); ambos tienen despliegue, desequilibrio, sorpresa y habilidad pero a veces se pierden en las defensas cerradas, especialmente cuando el Pity está embarullado, Auzqui no desequilibra o cuando no lo encuentran a Scocco (que a esta altura ya no sabe si estar en el área, si desequilibrar por afuera o juntarse con los mediocampistas).

Debió salir Fernandez y en su lugar entró De La Cruz (un jugador electrizante que aún no puede plasmar lo que insinúa), luego ingresaron Rojas (buscó su lugar defensivo e hizo poco en ataque) y Saracchi (ante la pésima noche de Casco, logró desequilibrar pero tampoco fue efectivo a la hora de ceder la pelota). Así se diluyó otra oportunidad de encontrar el juego que identifique a este plantel y de sumar para no alejarnos de la punta.

Por Charro.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Coincido con Charro, tanto en el análisis del partido como en lo que hace a las dificultades que tenemos para encontrar el equipo. Quiero juntar esto con el debate (muy rico) que se generó en el post pasado.

Tema delanteros: Acá venimos con problemas de formación (Sacando Driussi, hacía diez años que River no sacaba delanteros de las inferiores, los útimos Higuaín y Falcao) Cuando terminó la temporada, teníamos a Driussi, Alario; Mora (lesionado) Alonso (en el mejor de los casos, suplente para jugar media hora) Larrondo (recuperándose de una lesión) y Auzqui (llegado hace poquito ,amén que demuestra tener menos definición que una tele de 14)

El cuerpo técnico contaba con la salida de Driussi y Alonso (O sea te quedaban Dos y medio) se trajo a Sccoco y Borré. el primero con la idea de tener un delantero que entre y cumpla, el otro un proyecto. hasta ahí estábamos "justos" no nos sobraba nada para la cantidad de competiciones que se venían. Todo se modificó con la salida de Alario ( Delantero fija Nro1) y la centésima lesión de Larrondo (Tenía varios datos por otros lados que el mendocino vino con problemas de rodilla crónicos, que no pasó la revisión, pero vaya a saber que "mano" -llámese guita del representante - lo dejó en River)

Esto nos dejó mala parados para todo este semestre, pero también visto en perspectiva la mano viene mal: Mora podrá empezar a jugar en el mejor de los casos en el 2018, y con mucha suerte, después de estar parado tanto tiempo, volverá a ser un jugador pleno en el 2019, con casi 32 pirulos. Larrondo estará en condiciones si puede hacer una bendita pretemporada sin problemas y metiendo 10/15 partidos oficiales que le den ritmo de competencia.

Síntesis: La mano viene jodida. Yo que Gallardo lo cuido a Sccoco como si fuera un hijo, que lo lleve a la casa, le de la sopa y no lo deje salir con frío porque una gripe y jugamos sin delanteros.

Ahora, yendo al problema que nos plantean Charro y Mario de B. River no solo perdió delanteros y goles, también se cansó de vender defensores y perder solidez abajo, con arqueros de condiciones "regulares" y defensas "en ritmo de ensamble" es muy difícil jugar a mantener el cero, entregando la pelota. El que había armado un equipo parecido a esa idea era Ramón, porque estaban Barovero; Mercado - Maidana - Balanta y Vangioni, todos jugando juntitos hacía tres años.

Creo que Gallardo ensaya otra variante posible: como lo mejor del equipo, tanto por cantidad como por condiciones y actualidad puede encontrarlo en el medio, se juega a un equipo de posesión. El tema que vos tenés ahí es que para abrir equipos cerrados NECESITÁS MUCHA MOVILIDAD PARA CREAR LOS ESPACIOS Y VOLANTES QUE PISEN EL ÁREA Y HAGAN GOLES.
Pero hay un problemita: Miremos la cantidad de goles de nuestros volantes: Piti 218 partidos, 30 goles, promedio 0,13; Nacho 234 partidos 34 goles, promedio 0,16; Enzo Pérez 453, 43, promedio 0,09; Rojas, 375, 15, promedio 0,04. O SEA, NINGUNO SIQUIERA TIENE PROMEDIO DE 1 CADA 4.

Mario de Balvanera dijo...


No vi el partido.
Escuché los últimos 12 minutos por radio.
¿Se fijaron que la defensa de la Selección es prácticamente 100% RIVER?
Pezzella, Mamanna, Mascherano (fue convocado como defensor), Casco...
Times are changing, diría Fito.
Abrazo millonario!!!
...

tao077 dijo...

Buenas

Otro partido contra Equipo-tereso jajaja Ya es una costumbre. Esta vez tenían puesta la de Tigre y en el banco estaba nada menos que Caruso Lombardi.

Con respecto al debate del post pasado. Coincido con Mario de B. en la apreciación táctica, pero también concuerdo con Nico en que entregar la pelota ante los contrarios que atacan muy directo es poner a una defensa endeble de frente a volantes y delanteros, amén de que Gallardo también adolesce de otra cosa: como retrasar los equipos; cuando River empieza a aguantar los partidos tenemos que rogar que no emboquen como pasó en San Juan y nosotros si.
Para mi la fórmula más efectiva la consiguió el Muñeco con su primer River, aquél de las 8 fechas terribles. El toque de primera en velocidad demuele cualquier defensa cerrada, no deja tiempo para pensar al rival, agiliza movimientos en el campo... La cuestión es que ese equipo jugaba con un enorme 5 (Krane) que vivía desmarcándose en cada movimiento y cubría exactamente cada posición, y un 10 clásico (Piscu se te extraña) que servía de enlace y sabía volcarse a los costados. Hoy este River carece de ambas cosas (Ponzio es más corazón y empuje que táctica y no hay un enganche).
En cuanto a poder de gol también perdimos en defensa: cabeza (Pezzella, FM6, Mammana) y un lateral-central que en los tiros de esquina era carta ganadora (Mercado). Sin mencionar que también la defensa fue totalmente alterada de semestre a semestre... Ya que hemos cambiado el semillero de delanteros por centrales y estos también vuelan rápido (FM6, Pezzella, Mammana, Álvarez Balanta, etc.)
Una serie de eventos desafortunados (jaja) llevaron a que River una vez más se quedara sin delanteros y hoy la padecemos. Desde Inferiores ya vimos cuáles son las falencias de los chicos que llegan a primera (se me vienen a la cabeza un Franco López al que un par de pibes le ganaron la pulseada, un Kaprof que después de su paso por Francia no supe más, un Andrada que ostenta el récord de goleador histórico de inferiores y que me parece se puede llegar a convertir en un nuevo Sand).

Esperemos que encontremos la vuelta, pero si como dicen tenemos volantes de poco gol está complicada la cosa.

Saludos!